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Así condiciona la luz solar la decoración de una vivienda

A la hora de escoger una nueva vivienda o realizar una reforma en nuestro hogar la luz natural es un factor a tener muy en cuenta (junto a la ubicación o el tamaño) bien porque hay que procurar que todas las habitaciones cuenten con una ventana al exterior o bien porque la orientación de la vivienda contribuirá a envolver todos los espacios de un ambiente confortable y acogedor. Este aspecto también es importante si estamos pensando colocar alguna de las instalaciones fotovoltaicas que hoy en día hacen posible que generemos y consumamos nuestra propia electricidad. ¡Todo son ventajas!

Pero volviendo al aspecto puramente estético, es importante destacar que la luz condiciona muchas cosas en nuestra vida diaria casi sin percatarnos. La luz artificial es una solución en viviendas muy sombrías, pero no es la solución ideal por el gasto en las facturas que ello conlleva y porque la luz del sol contribuirá a que cualquier espacio destaque, aunque su decoración sea muy sencilla, por su vitalismo y alegría. Además, aunque no lo creas, mejorará hasta el estado de ánimo de sus habitantes.

Afortunadamente, en nuestro país la falta de luz solar no es un problema como en otros lugares de Europa donde las tasas de apatía y depresión se disparan, en buena medida, por esa causa. Esta situación se agrava especialmente si tu hogar es también tu lugar de trabajo. Si es tu caso, procura que tu despacho o estudio cuente con los máximos puntos de luz natural posibles. Aunque sea algo muy cotidiano, pocos son los que caen en la cuenta a la hora de elegir un inmueble de que el sol sale cada día por el este y se oculta por el oeste, así que cuando vayas a visitar alguna casa es más que conveniente acudir con una brújula. Así pues, cuanto más grandes puedan ser las ventanas, mucho mejor.

Los colores de las paredes también influyen a la hora de aprovechar al máximo la luz del sol. El blanco es el color básico donde la luz rebota más y contribuye a potenciar la luminosidad. Una de las tendencias actuales son las viviendas de estilo nórdico, las cuales se basan, sobre todo, en la abundancia de tonos blancos tanto en los revestimientos como en el mobiliario. Tampoco hay que olvidarse de no tapar los puntos de luz que existan con marcos ampulosos o cortinas demasiado espesas. Lo mejor es disponer marcos blancos y textiles finos y translúcidos.

Los azulejos también pueden ser unos buenos aliados para cambiar la percepción de una habitación que no cuente con luz natural. Si es tu caso, apuesta también por baldosas de color blanco y de acabado brillo. En cambio, si existe alguna ventana, podrás introducir algunos de los modelos con texturas y dibujos que existen en el mercado.

Para finalizar, otro truco para aquellos espacios que no disfruten de muchos puntos de luz es colocar espejos de gran tamaño para que los rayos reboten e inunden toda la vivienda. Si vives en un estudio o loft los espejos te ayudarán a amplificar toda la luminosidad si los colocas estratégicamente.

¡Manos a la obra!